Confección de Emelin:
Mientras sentía oír tus pasos atraves de los pasillos y yo encerrada en el cuarto escuchando la canción de Adele titulada I Can´t Make you love y la letra decía algo así: Apaga las luces y metete en la cama y has que las voces dentro de mi cabeza se callen… recuéstate conmigo y no me digas mentiras solo abrázame no seas condescendiente conmigo yo no puedo hacer que me ames si tú no quieres.
Con que nostalgia recordada la primera cita y la ultima, hace mucho tiempo que ya no salíamos y todo era tan monótono, tú con tus mentiras y yo aceptándolas todas, ahora pensaba que menos doloroso seria; si me case con la persona que cree en mi sueños o solo me case con alguien que solo vive por vivir, ya no recuerdo la última vez que sentimos la brisa del mar sobre nuestra piel y mientras la música seguía pensaba como decirte que ya me había cansado de todo esto; apague el ultimo cigarro respire hondo y en ese momento entraste a la habitación y como es tan habitual me saludas con un “Hola Cariño”, recuerdo que desde que paso esa escena en la habitación de la universidad no pude hablar con nadie más, siempre recordaba ese crudo episodio y la habitación llena de sangre de mi mejor amiga asesinada ,pero desde que te conocí todo fue distinto ¿Recuerdas donde nos conocimos por primera vez?
Sí, claro era la cafetería estaba tan nerviosa cuando te me acercaste a pedir un lapicero para escribir tu pedido fue tanto que todo mi cuerpo se paralizo y deje caer el café - que vergonzoso - tú solo lograste que yo rompa mis miedos quizás por todo eso acepte la segunda taza de café, muy fiel a tu estilo mirabas todo alrededor cada detalle, como vestía , y mientras me preguntabas cual era mi obra favorita, si me gustaban los chocolates y las rosas, fue creciendo la confianza y día tras días aquellos mensajes de texto se volvieron en detalles y así pasaron los días, los años hasta que una noche de invierno decidimos ponerle mucho calor a esos días fríos y te di un Sí como respuesta.
La casa que habíamos buscado para estar juntos el resto de nuestra vida le faltaba muchas reparaciones y de vez en cuando la calefacción no funcionaba pero no la necesitábamos mucho ya tenía mi mayor abrigo y ese abrigo eras tú.
Ya son más de la mediada noche y aún no se cómo explicarte todo esto que necesitaba volver a sentir que tenía tu corazón, tus pensamientos; decidida fui a la cocina a buscar un vaso con agua y mientras estaba agarrando el vaso vi en aquel viejo cajón algo que brillaba y me decía úsame solo una vez más, te sentirás bien después de hacerlo ,sabes que si, no pude contener mis ansias, sentía oír mi latidos, los pasos que daba al subir las escaleras, no podía oír nada a mi alrededor y mucho menos tu palabras; creo que solo me pedías que me detuviera que me amabas, pero ya no podía parar era una gran sensación, sentir como el hacha te destrozaba parte por parte tu cuerpo tan fuerte y atlético pero la noche y el cansancio fueron mis aliados , sí por fin llegue a tu corazón, por fin ahora si puedo decir que tengo tu corazón.

No hay comentarios:
Publicar un comentario